Con esta receta te harás unas pizzas que no tendrán nada que envidiar a la de ninguna pizzería.
Ingredientes para la masa (unas 4 pizzas):
- 1 kg de harina de fuerza.
- 1/2 litro de agua.
- 25 g de sal.
- 8 g de levadura.
Elaboración:
- En un cuenco echar casi toda la harina, hacer un hueco en el centro y añadir la levadura disuelta en el agua tibia. Amasar de dentro hacia fuera y añadir el aceite y la sal. La sal y la levadura nunca deben entrar en contacto directo porque afectaría a la fermentación.
- Espolvorear un poco de harina sobre la superficie que utilices para amasar.
- Amasar añadiendo harina hasta que la masa no se pegue en los dedos. Para amasar, hacer con la masa un churro y luego retorcerlo en espiral y volver a amasarlo, así durante unos 10 minutos.
- Dejar la masa en un cuenco tapada con un paño de algodón durante 25-30 minutos. En este tiempo la masa prácticamente doblará su tamaño. Un truco para saber que está lista es tocarla con un dedo y ver si cuando lo apartas la masa vuelve a su forma original.
- Una vez fermente la masa, cortamos unos trozos de masa y los amasamos de nuevo dándoles forma.
- Ya tenemos la masa lista, ahora solo queda añadirle los ingredientes que quiera. A mí personalmente me gusta echarle el orégano al tomate, hacer una base de queso, añadir el resto de ingredientes y cubrirla de nuevo de queso.
- Para que quede bien la pizza es muy importante tener precalentado el horno a máxima potencia y meter la pizza con el horno bien caliente.
- Espero que les guste.
- ¡¡¡¡¡Que aproveche!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario